El cuarzo es un mineral compuesto por dióxido de silicio (SiO2) y es el mineral más abundante de la corteza terrestre después de los feldespatos. Es el componente de las rocas magmáticas y metamórficas ricas en ácido silícico.
Suele encontrarse en grietas y filones hidrotermales y su estructura cristalina es trigonal, formando pirámides en sus extremos. Los cristales de cuarzo pueden encontrarse aislados en doble punta o en agrupaciones formando drusas o geodas.